viernes, 19 de noviembre de 2004

Excepción


No tenía por costumbre conmoverse por su trabajo. Más bien aplicaba un método frío y rutinario acorde a los designios de su oficio. Tantos años de experiencia le habían permitido organizarse hasta el punto de delegar en otr@s para cubrir el creciente aumento de demanda. Pero en casos tan especiales como éste, intervenía personalmente.

Durante años preparó su muerte; quería cuidar al máximo cada detalle. A la espera de su nuevo traje, afilaba su guadaña con esmero mientras planeaba la ocasión de dar fin a tan buen cliente.

La opinión pública lo expresó como una lenta agonía fruto de su avanzada edad. En realidad, no era más que el final de un proceso previamente establecido. Templó su herramienta de trabajo, tornando en calor el frío característico, y segó con amor de madre el alma de aquel dictador que tantos encargos le había realizado en vida.


Javi Donate

2 comentarios:

GUM dijo...

¿alguna Dedicatoria en especial?

El notas dijo...

Está bien escrito, parece que se lo tenía bien merecido pero.. ¿ a que vienen los parrafillos ?

(Por cierto, hay una errata, donde pone @ deberia poner o)

Saludos a tod@s };-)